lunes, 27 de noviembre de 2006

Zapatero visita la redacción de EL PERIÓDICO


El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, ha visitado esta mañana la redacción de EL PERIÓDICO DE CATALUNYA. El jefe del Ejecutivo se encuentra en la capital catalana para pronunciar una conferencia en el foro de opinión Tribuna Barcelona.

Acompañado por el vicepresidente ejecutivo del Grupo Zeta, Antonio Asensio Mosbah, y por el director de EL PERIÓDICO, Rafael Nadal, Zapatero se ha interesado por el funcionamiento del diario y ha conversado con varios periodistas de la redacción.

El jefe del Gobierno protagoniza esta tarde la sesión número 300 de Tribuna Barcelona con la ponencia Una visión de España para Catalunya. El futuro presidente de la Generalitat, José Montilla, presenta el acto, que se celebra en el Hotel Palace de la capital catalana.


El Periódico (20/XI/06)

C´s# = ¿Quién pasó la información a quién?, o ¿hablaron sólamente de subvenciones?. Por qué al Sr. Sopena (casado con la directora), ya le pasaban información desde Ferraz en el 2005 VER IMAGEN (Leída en Periodista Digital)

Impulsores y diputados de C-PC desconocían el pasado de su líder

Incredulidad, sorpresa y más relativismo que crítica. Así puede resumirse la reacción que tuvieron ayer destacados intelectuales y dirigentes de Ciutadans-Partido de la Ciudadanía (C-PC) al saber que su líder, Albert Rivera, había escondido su afiliación a las Nuevas Generaciones del PP entre el 2002 y abril del 2006, tres meses antes de ser elegido presidente de C-PC en su congreso constituyente.

El 9 de julio, al frente de una lista transversal indefinidamente ubicada entre derecha e izquierda, Rivera se impuso como líder de C-PC por 219 votos contra los 49 de una lista escorada hacia la izquierda no nacionalista.

El catedrático de Derecho Constitucional Francesc de Carreras y el periodista Arcadi Espada, dos de los 15 intelectuales que en el 2005 impulsaron Ciutadans, admitieron ayer que desconocían "el incidente biográfico" de Rivera. Lo mismo reconoció el diputado José Domingo, número dos en la lista de Ciutadans del 1-N. Su tercer compañero con acta en el Parlament y secretario general de C-PC, Antonio Robles, no pudo ser localizado ayer por este diario.

MENTOR DESCONCERTADO

De Carreras, que cerró simbólicamente la lista electoral de Ciutadans y tuvo a Rivera como discípulo aventajado en la universidad, se negó a hacer ningún comentario sobre una noticia que, a media tarde de ayer, aún ponía en duda, máxime sin haber podido hablar antes con Rivera. Tampoco Domingo había hablado a última hora de la tarde con su jefe de filas pero, pese a su sorpresa inicial, quitó importancia a la revelación con argumentos parecidos a los que Espada sí quiso exponer.

El periodista dijo que si Rivera, al ser escogido líder de C-PC, detalló que era "votante desencantado" de CiU, PSC y PP, "también debería haber dicho que había militado" en el PP. Con todo, a Espada le parece "estupendo" que se afiliara al partido que creyera "conveniente" y denuncia que en Catalunya "para cierta opinión pública ser del PP es como ser carcelero en Auschwitz". Al filo de esta reflexión, Espada criticó que se mezcle la afiliación de Rivera con el apoyo del PP a la guerra de Irak.

ENTRE MAO Y EL LIBERALISMO

Espada, que dice que "el PP dejó escapar a un crack de la política", no ve "contradicción" en que Rivera escondiera su pasado y se presente como líder de otra forma de hacer política. Opina igual Domingo, "socialdemócrata" en un partido que "encaja" también en "el liberalismo progresista". El número dos de Ciutadans, maoísta de joven, zanja la polémica: "Cualquier evolución es legítima" y Rivera, cambiando el PP por Ciutadans, "ha avanzado ideológicamente".


Marc Andreu (El Periódico) (23/XI/06)
C´s#: ¡Oh!, ¡cielos!. Nos han descubierto..., ahora nos toca a nosotros... Queremos saber que tal fue la reunión con Zapatero el día 20 de Noviembre...dos días antes de la noticia de Albert y el PP...

La ocasión perdida


Tribuna libre de Albert Boadella para El Mundo.

El fallo definitivo del concurso para la adjudicación de la Plaza de las Ventas de Madrid es una mala noticia para la tauromaquia en general. Nada que objetar sobre la empresa a la que le ha sido adjudicada la gestión de la plaza, la cual tiene demostrada su larga solvencia en este terreno. Sin embargo, la eliminación de Simón Casas y su proyecto renovador, revela un serio contratiempo hacia la consecución de un cambio de imagen de la tauromaquia en España. Ello viene a significar que quienes elaboraron las condiciones del pliego que ha impedido el acceso a nuevas perspectivas innovadoras estaban decididos a no tomar en consideración el progresivo declive que sufren los toros en nuestro país. ¿Rutina o falta de percepción futura? No deberíamos pensar en otras cosas.

Hasta finales de los 60 del pasado siglo XX, la fiesta taurina se había desarrollado en España como algo que formaba parte de la cotidianidad, y por consiguiente, nada hacía prever un retroceso en su sólida inserción. La enorme irradiación de la tauromaquia, esparcida entre la simbología y el lenguaje corriente, así como la exaltación de la mitomanía popular derivada hacia las figuras del toreo, constituían el fiel reflejo del arraigo social y su indiscutible primacía como festejo nacional. Todas las ciudades españolas sin excepción, mantenían altos índices de audiencia en sus plazas, mientras los medios de comunicación públicos y privados destinaban amplios espacios a los toros. En definitiva, ningún ciudadano español sentía el mínimo complejo por declararse aficionado a la corrida, y más bien lo contrario podía suponer una rareza.
La enorme implantación social era el resultado de casi dos siglos, en que el mundo de la cultura y las artes había elegido los toros como uno de los temas preferenciales en sus distintas expresiones. Consecuencia directa de ello, es la imagen taurina que monopolizó la mirada extranjera como síntesis tópica de lo más hispano.
Esta poderosa dinámica empieza a perder empuje a finales de los 60, como resultante de una substancial transformación en la sociedad española, cuya mayor permeabilidad ante las corrientes progresistas europeas condiciona la mirada sobre los toros, vinculando la fiesta a un anacronismo social (la España mísera) y político (la dictadura). La nueva percepción, posiblemente superficial pero mayoritaria, encajó la tauromaquia en el modelo de una España asilvestrada y antagónica con el concepto de modernidad. Desde entonces, nada se ha hecho para corregir una visión tan sesgada de la corrida. Todo lo contrario, la decisión final que toman los responsables de Las Ventas es una prueba más del automatismo que provoca la rutina decadente. Ni la catastrófica temporada pasada ha sido suficiente para romper la inercia e inducir a un cambio de rumbo. Dicen, que lo que ha primado en la selección ha sido la experiencia y el dinero, o sea, más de lo mismo, y por lo tanto, la inhibición ante los retos del futuro.
Cualquier actividad que proviene de un pasado espléndido y penetra en un nuevo contexto menos favorable, tiende a encubrir, bajo la inercia derivada de los tiempos boyantes, su rechazo al análisis de las causas, y por consecuencia, se adapta dificultosamente a la nueva situación, estableciendo su defensa en el inmovilismo. El conjunto de la estructura taurina española se halla hoy bajo este influjo.
Resulta obvio que en nuestra sociedad no sólo ha decrecido el protagonismo de la fiesta, sino que su propia permanencia es puesta en tela de juicio por determinados sectores culturales claramente contrarios. Es indudable que a lo largo de la historia la polémica acompaña siempre los ritos taurinos, pero en los últimos tiempos, el auge de las nuevas doctrinas animalísticas hace sentir con mayor fuerza el rechazo. Si a ello sumamos algunas iniciativas políticas en esta dirección, podemos concluir que el clima vigente no es el más propicio para un desenvolvimiento cómodo y natural de las actividades taurinas, tal como ocurría hace escasas décadas.
A diferencia del pasado inmediato, los jóvenes espectadores frecuentan poco las plazas, y una parte substancial del mundo artístico-cultural, o bien es contrario a la corrida, o si le agrada, prefiere no expresar la opinión en público, pues intuye que puede influir negativamente en su propia audiencia. En definitiva, debemos admitir que la afición a los toros no es en la actualidad un valor en alza, muy especialmente en los medios culturales.
Este hecho, resulta determinante para comprender la tibieza con que numerosas administraciones políticas tratan los temas taurinos, y al mismo tiempo, atestigua el desinterés mayoritario de los medios de comunicación. Resulta incuestionable que hoy los toros han dejado de ser una materia refrendada por el prestigio del mundo cultural. Ello nos sitúa ante un panorama general que evidencia un impasse, donde las acciones en contra no son aún taxativas, pero todo se desenvuelve entre un clima de condescendencia o tolerancia del hecho, muy poco esperanzador.
De aquí, la gran responsabilidad de lo que ocurre en La Plaza de las Ventas, pues todavía representa la máxima jerarquía en la difusión del arte taurino. Esta situación tan relevante, y alcanzada por un espléndido historial, la sitúa como lugar idóneo desde donde establecer las pautas que actualmente puedan regir la tauromaquia mundial. La falta de una institución que aglutine y fomente la variedad de componentes que hacen posible la fiesta de los toros, delega en una plaza tan carismática esta función implícita, que además de España, se extiende a Portugal, Francia y Latinoamérica.
En este sentido, no le corresponde actuar como una plaza más que busca, por encima de todo, el supremo objetivo de la rentabilidad. Aquí está el gran error de sus gestores, los cuales deberían aceptar la trascendental responsabilidad de esta plaza en la difusión de un nuevo estilo que sitúe los toros fuera de lo anacrónico. Ello les obliga a plantear las mejores condiciones para facilitar esta clase de política empresarial.
La opción presentada por Simón Casas pretendía crear una nueva divulgación didáctica de la fiesta que hiciera posible restablecer la conexión entre el mundo de la cultura y la tauromaquia, tal como ocurría hace escasas décadas. Como empresario de la plaza de Nimes, Simón Casas viene demostrando desde hace muchos años que es posible un nuevo estilo. Nimes es hoy la feria del mundo más abierta a la sociedad, a la juventud, a la cultura y al arte. Posee el mejor público taurino que he conocido. Culto y respetuoso, enardecido y tolerante.
En definitiva, Nimes debiera ser el sueño y ejemplo de nuestras ferias. Pero de nada ha servido este modelo, el mejor embajador del arte español en el extranjero se ha quedado por tercera vez proscrito en sus anhelos de barrer la caspa que rige buena parte de nuestro mundo taurino. No volveremos a tener una ocasión tan propicia.
Al igual que en la dictadura, en cuestiones artísticas y culturales siempre nos quedará el recurso de Francia. De momento, una de las máximas figuras del toreo actual ya nos llega del país vecino, y muy pronto, no se sorprendan si alguna plaza francesa acaba tomando el protagonismo al que viene renunciando tan irresponsablemente la plaza de Las Ventas.


Albert Boadella
El Mundo, 27-11-2006

José Montilla recibirá clases para mejorar su catalán


El presidente electo reconoce que su nivel escrito de catalán es "deficiente".
Tendrá un profesor particular para mejorar su dominio de la pronunciación y la ortografía.
Considera cerrado el debate de la lengua en Cataluña


El presidente electo de la Generalitat, José Montilla, tiene previsto tener un profesor que le ayude a mejorar su catalán sobre todo el escrito que reconoce que es "deficiente".

En una entrevista en Catalunya Radio, el político socialista nacido en Iznájar (Córdoba) ha reconocido que los que le critican por su nivel lingüístico "tienen una parte de razón" y que se pondrá es manos de un especialista para "mejorar" su nivel.

Los que me critican por mi nivel de catalán tienen una parte de razón

En los largos discursos que Montilla ha leído desde que quedó cerrado la reedición del tripartito, se le ha notado con problemas en la pronunciación de algunos sonidos, algo normal para un castellanohablante como él.

En la intimidad, el político socialista habla en castellano con su mujer Anna Hernández mientras que utiliza el catalán para dirigirse a sus hijos pequeños.

Debate superado

Montilla ha dado por "muy superado" el debate de enfrentamiento entre catalán y castellano en Catalunya y apuntó que planteamientos como los que hace Ciutadans-Partido de la Ciudadanía "tendrían sentido a inicios de los años 80, pero ahora está superado".

En cualquier caso, el presidente de la Generalitat ha afirmado que "trabajaré" para que "si alguien piensa lo contrario" también dé este debate por superado.

Tiene su gobierno decidido

El ejecutivo que gobernará Catalunya ya está decidido y mañana será anunciado por José Montilla pero el presidente electo ha dicho que hay algunos de los futuros consellers a los que "aún no se les ha comunicado".

Montilla se ha mostrado partidario de limitar los mandatos del presidente de la Generalitat ya que "no es bueno que se eternice en el cargo".

20 minutos (27/XI/06)

C´s# = ¡Prufasó Nibey Sé...!, ¡Prufasó Nibey Sé...!

La Catalunya enmoquetada

Y para acabarlo de arreglar, ha llegado Benach, auspiciado por el PSOE de José Luís Rodríguez Zapatero y ha gritado “Visca Catalunya Lliure”. Después de llenarse la boca con buenas palabras, apelando a su condición de presidente de todos los diputados del Parlament de Catalunya, Ernest Benach ha aprovechado su condición para reclamar la independencia de Catalunya.

Yo también quiero una Catalunya libre. Una Catalunya libre de personajes que insultan o desprecian a quienes ni somos ni pensamos como ellos. Una Catalunya libre de salvadores de la patria. Libre de ataduras y complejos, libre de perjuicios que limitan la capacidad de creación y de pensamiento. Quiero una Catalunya libre del poder político que critica el centralismo de Madrid para imponer el centralismo de Barcelona.

Quien ha hecho posible que Ernest Benach pueda gritar desde la presidencia del Parlament esa proclama independentista es Pepe Montilla. Montilla es un hombre acomplejado por no haber nacido en Catalunya y por no pertenecer a la burguesía pija a la que pertenece Maragall. Durante esta campaña electoral ha tenido la necesidad de hacer meritos, de conseguir más puntos en ese carné imaginario de buen catalán que acostumbran a expender los nacionalistas catalanes.

Por eso ahora ha ungido al interlocutor de ETA en Perpignan como número dos de su gobierno entregándole el control absoluto sobre la cultura, la política lingüística, el deporte (selecciones deportivas incluidas) y las relaciones exteriores de la Generalitat.

En estos momentos en los que la deriva nacionalista del PSC se ha hecho tan evidente, considero muy significativo que haya irrumpido en el escenario político de Catalunya una nueva formación de izquierdas que vaya al Parlament a defender lo mismo que, desde el centro derecha ha defendido siempre y en solitario el Partido Popular.

En esta legislatura, los partidos de Piqué y Rivera deben unir esfuerzos para que el centro derecha y la izquierda no nacionalista en Catalunya trabajen coordinadamente como lo hicieron en el País Vasco en defensa de la libertad y la Constitución, Carlos Iturgaiz y Nicolás Redondo.

Me parece una buena noticia que Albert Rivera vaya a utilizar el castellano en sus intervenciones. Yo le seguiré hablando en catalán, la lengua en la que ambos nos hemos comunicado hasta ahora. De igual manera que cuando debata con Antonio Robles, diputado de Ciutadans, lo haré en castellano por la misma razón.

Los nacionalistas han utilizado durante demasiado tiempo la lengua como arma arrojadiza. Los diputados, como el resto de catalanes, debemos poder utilizar cualquiera de las dos lenguas oficiales en Catalunya sin que nadie nos llame la atención por ello ni nos acuse, como lo hizo Pujol, de poner en peligro la convivencia por el simple hecho de expresarnos en castellano. Yo lo hago. Mi lengua materna es el catalán y lo utilizo en mis intervenciones en defensa de la libertad que tienen los ciudadanos para utilizar el castellano y en contra de las multas y las cuotas lingüísticas. Quiero una Catalunya libre para poder utilizar la lengua que me venga en gana.

El presidente del Parlament de Catalunya, además de reivindicar la “Catalunya libre”, apostaba en su discurso de inicio de curso por alcanzar la utopía. Su utopía se resume en ser el presidente de un parlamento de un Estado soberano e independiente. Benach, como el resto de dirigentes políticos nacionalistas, prefiere reivindicar la libertad de Catalunya antes que reivindicar el derecho de los catalanes a ser libres. Por eso no podemos permitir que nadie nos diga en que lengua debemos escribir, hablar o amar. Hablar en catalán o en castellano en el Parlament de Catalunya es una elección personal. Desde siempre, el nacionalismo catalán ha convertido la lengua y la identidad en una bandera política.

Dejemos que la gente (incluyendo a los diputados en el Parlament de Catalunya) se exprese con total libertad en la lengua que quiera y combatamos con todas nuestras fuerzas a quienes quieren imponer un monolingüismo y una idea de país que sólo existe en su Catalunya enmoquetada.

Daniel Sirera (La Mañana) (27/XI/06)

¿Ciudadanos?

«Reivindicamos la Ilustración y contamos con los principios cristianos de Occidente. ¡Ciudadanos de España, uníos!» Así se expresaba Antonio Robles, secretario general de Ciudadanos de Cataluña, en una de sus últimas columnas en "Libertad Digital", donde es colaborador.

¿Quién conforma este, a primera vista, totum revolutum de neoconversos trasnochados? Ex-comunistas, anarco-derechistas, liberales, franquistas, cristianos, socialdemócratas y algún que otro ateo.

¿Qué les une? España. Pero no una España cualquiera, no. Una España al parecer ilustrada. ¿Y eso qué es? Ni idea, en sus proclamas no aparece la república como forma de gobierno. Curiosamente se denominan antinacionalistas.


¿Su procedencia? Acción Cultural Miguel de Cervantes, Foro de Babel, Asociación por la Tolerancia, etc. Todas las asociaciones contrarias a un Estatuto propio para Catalunya.

Sus valedores, lo más rancio del panorama: Foro de Ermua, COPE, "Libertad Digital" y "El Mundo". Lo intentaron en 1981 los mismos que ahora les dan pábulo. Entonces fue un manifiesto en defensa del castellano con firmas tan prestigiosas como Amando De Miguel y Federico Jiménez Losantos.

Y sigue Antonio Robles ya desmelenado: «Hoy, sólo España nos garantiza de verdad ser ciudadanos iguales ante la ley. Por eso, lo más progresista, lo más moderno, lo más igualitario, lo más de izquierdas (si se pudiera recuperar su concepto ilustrado) y a la vez lo más liberal es la reivindicación de España», alertándonos de las «castas predemocráticas llamadas nacionalistas. Cuatro ideas predemocráticas, casi feudales», y acaba con un llamamiento para «volver a armarse de conceptos intelectuales que nos ayuden a desen- mascarar esta infantilización de la política. Y reivindicar España». Apelar a España y a los principios cristianos de Occidente le parece armarse de conceptos intelectuales. ¡Dios cómo está el patio!

En Francia la nueva derecha se alimenta de pijos que en sus años mozos jugaron a izquierdistas, ahora chupando de la piragua del Estado todos contra el terrorismo islámico. En España, como ya tienen enemigos seculares, a estos pijos no les hace falta inventar otros, afortunadamente para su escaso desarrollo telencefálico. No llegan ni a reaccionarios. ¿Ciudadanos? No, los soplapollas de siempre. Aquí montan Foros.

Gara (sin fecha)

C´s# = Los cadáveres del armario de éstos..., son mucho más recientes.

Los cadáveres de Ciutadans

Casi todo el mundo tiene un cadáver en el armario, pero normalmente no se descubre tan velozmente como el de Ciutadans. Lo propio de los cadáveres de los armarios de nuestra historia es dar la sorpresa a su debido tiempo, no a las primeras de cambio, como le ha pasado a Albert Rivera. Lo suyo no era exactamente un cadáver. Lo convirtió el mismo en cadáver cuando mintió sobre el armario.

Haber sido militante del PP, o de NN.GG., que es igual, como acabamos de saber, es completamente respetable. Y sería igual de respetable que lo hubiera sido del PSC o de cualquier otro partido. Es más, me encuentro entre la minoría que considera digno de elogio tener los arrestos de comprometerse con un partido en los tiempos que corren, de individualismo, del sálvese quien pueda y de la pésima (e injusta) imagen social de los partidos.
El problema de Rivera y, por extensión de Ciutadans, es que consideraron conveniente ocultar esa, al parecer, censurable militancia además del dato también significativo de que acabara justo una semanas antes de proclamar la candidatura de Ciutadans. No se trata sólo de que la silenciaran sino que la negaron cuando se preguntó por el asunto. Y eso es lo que convierte esa historia en un maloliente cadáver.
Ciutadans se presentó como una agrupación de ciudadanos que deseaba superar las limitaciones de los partidos tradicionales, sus vicios y sus excesos. Irrumpió en el panorama político dándoles lecciones. Y les hacen falta, desde luego. Pero si uno pretende revolucionar la política con tirones de orejas a los partidos no puede estrenarse con una mentira. Porque eso acaba inmediatamente con la proclamada pureza de origen, con la superioridad ética y con la revolución ciudadana.
La oculta militancia de Rivera presenta un segundo rasgo que la asemeja a un cadáver y es que lo escondido fuera precisamente la militancia en el PP. Barrunto que una afiliación al PSC no se hubiera disimulado. O, en otras palabras, Ciutadans, que pretende romper la asfixia y los tabúes impuestos por el nacionalismo en Cataluña, ha comenzado aceptando implícitamente uno de ellos, el de la vergüenza social de ser del PP.
ESCRIBE EL RESTO DEL ARTÍCULO AQUÍ


Edurne Uriarte (ABC.es)(26/XI/06)

C´s# = ¡No te digo!. A ver que encuentran el día que abran la cripta del ABC... hasta momias....

La mala suerte del perro nazi







La historia del presidente de CiU, Artur Mas, guarda paralelismos con la del campeón alemán de los pesos pesados de los años 30 Max Schmelling, uno de los mejores púgiles europeos de la historia, condenado al ostracismo por el uso que los dirigentes nazis hicieron de sus victorias.

La historia de la categoría reina del boxeo, los pesos pesados, durante la Segunda Guerra Mundial está plagada de tristes historias en las que el deporte era un instrumento más al servicio de la propaganda bélica y, a menudo, algunos de los mejores campeones tenían que probar el amargo sabor de la derrota a pesas de haber logrado el fajín que les acreditaba como reyes absolutos de la categoría. Algo parecido viene ocurriendo en la política catalana desde hace algo más de tres años, si no fuera porque aquellos púgiles salidos de hogares humildes fueron auténticos colosos que hoy ocupan por derecho propio los más destacados párrafos de la historia del boxeo, mientras que los dirigentes políticos catalanes difícilmente serán recordados por proeza alguna.


Max Schmelling, seguramente el mejor boxeador europeo de todos los tiempos, nació en Brandeburgo en 1905 y se convirtió en púgil profesional en 1929, con apenas 24 años. En su adolescencia había visto los memorables combates de Jack Dempsey, el primero de los grandes boxeadores negros que ha alumbrado Estados Unidos, con permiso del malogrado Al Johnson. Aunque el aire político en Alemania a finales de la década de 1920, con la imparable ascensión del Partido Nazi y la creciente popularidad de sus postulados racistas, Schmelling soñaba con emular a los negros norteamericanos que, segregados y despreciados por sus compatriotas, empezaban a hacerse dueños absolutos del deporte del cuadrilátero.Toda una paradoja para quien sería utilizado por el nazismo como icono de la superioridad de la raza blanca y odiado por el resto del mundo como el «perro nazi» cuando al fin logró el cinturón de campeón.

Para cuando Schmeling se calzaba por primera vez los guantes de profesional, Dempsey hacía dos años que se había retirado de los rings. Pero en 1930, con Adolf Hitler a punto de convertirse en canciller alemán, se le presentó a Schmelling una oportunidad de oro. La retirada de Dempsey había dejado la elite del boxeo norteamericano huérfana. Dempsey colgó los guantes tras ser derrotado en dos ocasiones por un púgil mediocre, Genne Tunney. El reinado del nuevo campeón fue corto. Arrebató la corona a Dempsey, le volvió a derrotar cuando le concedió la revancha y sólo hizo una defensa del título, el 26 de julio de 1928 ante Tom Heeney en el Yankee Stadium de Nueva York. Tunney ganó por KO técnico y no quiso volver a tentar a la suerte. Abandonó el boxeo tras haberle arrebatado el título a Dempsey y, para demostrar que no fue cuestión de suerte, defenderlo victoriosamente una vez.

El trono de campeón del mundo, sin embargo había quedado vacante.Y, en norteamérica pocos púgiles podían compararse a Dempsey.Los organismos internacionales tardaron dos años en encontrar a dos boxeadores con posibilidades de convertirse en campeones: el estadounidense Jack Sharkey y el aleman Max Schmelling. La velada iba a celebrarse en la que por entonces era la catedral mundial del deporte de las 12 cuerdas, el Yankee Stadium de Nueva York, el 12 de junio de 1930. Schmelling resultó victorioso, pero no por sus principales cualidades pugilísticas, su técnica, su velocidad y su pegada, sino por lo que pareció ser un golpe bajo propinado por su adversario que el árbitro Jim Crowley consideró suficientemente grave como para otorgar la victoria al alemán por descalificación de Sharkey.

Tras varias defensas de su corona, la perdió a los puntos de forma «injusta» un 21 de junio de 1932 en Long Island ante quien había sido su víctima en la coronación. Los jueces dieron ganador por puntos al norteamericano Sharkey tras los 15 asaltos reglamentados cuando el alemán «había boxeado mucho mejor que Jack, infrigiendo un terrible castigo», según los cronistas de la época.

El clima prebélico en Europa era ya una realidad y los alemanes no eran precisamente un pueblo bien visto en Estados Unidos.

Pero Schmelling no estaba acabado. El boxeador alemán estaba más que dispuesto a recuperar el cinturón de campeón. El campeón del momento, James Braddock buscaba aspirantes en 1936. Schmelling debía antes, sin embargo, debía derrotar al joven y formal -y negro- Joe Louis, la sensación del pugilismo norteamericano, un auténtico fenómeno salido directamente de las plantaciones de algodón de Alabama, que que había derrotado a todas las grandes figuras blancas de los pesos pesados como Primo Carnera, Paulino Uzcudun, Max Baer... que contaba con 22 años de edad y estaba lanzado a por el título mundial.

El combate se celebró el 19 de junio de 1936, una vez más en el neoyorkino Yankee Stadium se había convertido en la guerra de las razas. Hitler iba a presidir el 1 de enero los Juegos Olímpicos de Berlín, aquellos en los que se negó a estrechar la mano del atleta americano negro Jesse Owens. Schmelling contaba por entonces 31 años y sabía lo que era ser campeón del mundo.En cambio, Joe Louis era un púgil joven, sin tropiezo alguno y que había vencido a lo largo de sus últimas 27 peleas.

En el duodécimo round de la pelea, cuando Schmeling, con una mágnifica técnica y un encaje adecuado, soltó un durísimo gancho que envió al púgil de color al tapiz donde le contaron los diez segundos fatídicos. Pero la victoria no permitió al «perro judío» disputar el campeonato a Braddock. A los ojos del mundo era un nazi a pesar de que ayudaría después a esconder judíos en su casa y salvó a algunos de los campos de concentración. Incluso pidió al Fürher que protegiese a los americanos en los Juegos de Berlín del 36.

Dos años más tarde, Schmelling volvió a aspirar a la corona.El campeón en aquella ocasión no era otro que Joe Louis. El púgil negro propinó una soberana paliza al alemán que, deshonrado, perdió el favor de Hitler. La amistad que más tarde mantendría con Louis -cuyo entierro sufragó en 1981- no serviría para que Schmelling fuera tratado nunca como un vencedor. El presidente de CiU, Artur Mas, con su continua exhibición de sus victorias en votos mientras José Montilla se ocupa la Casa dels Canonges, debería tomar nota de la historia de Schmelling. Y, aunque es cierto que Montilla no es Joe Louis, quizás CiU debería empezar a buscar un nuevo aspirante capaz de noquearle en el próximo campeonato.


Félix Martinez en Secretos y mentiras
El Mundo, 26-11-2006

Antonio Robles en Localia (1 de 2)



La calidad del video es muy mala,.. igual que la cadena de Polanco.

Antonio Robles en Localia (2 de 2)



As usual,...La calidad del video es muy mala,.. igual que la cadena de Polanco.

Antonio Robles en Radio Tele-Taxi



La calidad es aun peor que la de la cadena de Don Jesus, pero Don Justo Molinero, seguro, no tiene tantos medios.
Por cierto, se pierden unos minutos al empezar,... ¡¡estaba en el tigre!!.

Discurso completo de Albert Rivera en el parlament



Rivera en el parlament catalán respondiendo en español a la propuestas del candidato a la Presidencia de la Generalitat el bachiller Montilla.

CITY FM Radio entrega los premios a la Libertad.


Madrid. El próximo miércoles 29 de noviembre se celebrará, con motivo del II aniversario de esta emisora, la entrega de los premios "City Fm Radio a la Libertad". Entre los premiados se encuentran: El Real Madrid C.F, Telemadrid, Ciutadans-Partido de la Ciudadanía-, Ausbanc Consumo, la Asociación Victimas del Terrorismo, la plataforma ciudadana "Peones Negros" y la Camara Oficial de Comercio e Industria de Madrid.

Durante la celebración de la gala se anunciarán las novedades de programación de City Fm Radio para los próximos meses.La Gala cuenta con el patrocinio de "Serman-Pro" y "Sennheiser", líder mundial de sonido.La entrega de los premios se realizará en la discoteca Cat´s en Julian Romea nº 4 a partir de las 20:30 del citado 29 de noviembre.

Ciudadanos de Cataluña ya cuenta con afiliados en Córdoba

El coordinador de Andalucía de la formación, Mario Acosta, ha confirmado a este Semanario que el partido revelación de las últimas elecciones catalanas no descarta presentarse a los próximas comicios municipales

Que comiencen a temblar los políticos locales, porque el que se ha convertido en el partido sorpresa de Cataluña está creciendo casi a modo de tsunami por todo el territorio nacional . Una gigantesca ola que llega hasta la misma Córdoba donde, y según ha confirmado a este Semanario el coordinador de esta formación política en Andalucía Mario Acosta, se cuenta con una docena de afiliados y en el futuro se prevé implantar una agrupación territorial, la unidad de acción básica de este partido. Un número que crece y crece, en todo el territorio de la comunidad autónoma andaluza y que eleva a 200 los miembros de esta nueva revelación política en la que se ha convertido Ciudadant, al conseguir en Cataluña cerca de 90.000 votos y nada menos que tres escaños en el Parlament.

Euforia que se extiende ya por todas las provincias españolas como la pólvora donde el partido, fundado por un grupo de intelectuales donde destaca Albert Boadella, cuenta con 3.500 afiliados y 10.000 simpatizantes y desde la cual se está debatiendo en la actualidad la posibilidad de presentar listas de candidatos de cara a las próximas elecciones municipales. De momento, en Andalucía quieren participar contra el estatuto, “oponiéndonos”. Así lo confirma el coordinador en la comunidad de Ciudadant, en donde existen dos agrupaciones, “la de Sevilla y la de Málaga”, y en la que – y debido a la avalancha de adhesiones al proyecto– en breve se baraja que cada provincia tenga su propia agrupación. “De cara a las elecciones municipales —comenta Acosta– todavía estamos en el debate dentro de la formación si nos presentamos o no y si estamos preparados, pero aún no tenemos decidido nada. Desde luego es un partido con clara vocación nacional ”.

Y es que Ciudadant, presidida en la actualidad por el joven Albert Rivera, no ha acabado de constituirse al completo, ya que con escasos cinco meses de vida –se presentó en sociedad en julio de 2006- sigue en proceso de restructuración, donde la proliferación de agrupaciones determinarán en gran medida el futuro más inmediato de este partido que encuentra su justificación en Andalucía, según afirma rotundo Mario Acosta. “Ciudadant puede aportar a la comunidad la lucha contra la corrupción; contra la identidad autonómica movida por la casta política andaluza; la lucha por mejorar las condiciones de bienestar de los ciudadanos, en vez de dedicarse a otro tipo de actuaciones fomentadoras de divisiones, o la lucha contra la complicidad que tiene el PSOE andaluz favoreciendo al PSOE nacional en su deriva de acuerdo con todos los nacionalismos de toda España y un largo etcétera. En este sentido creemos que se precisa de un nuevo partido político que intenta regenerar toda esta situación”.

Definidos como liberales, progresistas y socialdemócratas, dicen huir de cualquier etiqueta que se les cuelgue, resaltando que entre sus filas hay una composición ideológica variada cuyo único nexo en común es “estar en contra de la degradación democrática que está ocurriendo ante nuestros ojos”.



Decepcionados con el PP

Acosta sostiene que la formación no perseguirá, en caso de confirmarse su presencia en los próximos comicios, “conseguir votos acudiendo a las bases electorales de uno u otro partido, sino que nosotros reclamamos los votos decepcionados de los partidos habituales y también los de aquellas personas que se quedan en casa porque se creen que su voto no tiene sentido para transformar una realidad que no es la más adecuada”.

Entre las personas que están acudiendo a afiliarse a este nuevo partido en Andalucía, Acosta destaca que además de que se trata fundamentalmente de profesionales liberales, con un nivel cultural elevado y con diferentes adscripciones ideológicas, lo que más resalta es que están llegando “muchas personas decepcionadas con el PP”. Algo que no deja de ser paradójico donde en principio podría parecer todo lo contrario, tras obstentar el PSOE 20 años al frente del gobierno de la comunidad. “En Cataluña sí se ha dado el caso de que casi todas las personas que componen las agrupaciones de allí eran ciudadanos muy decepcionadas con el PSC, pero en cambio aquí, en Andalucía, se nos acerca gente muy molesta con el PP”.

¿Por qué? Según Acosta, el partido liderado por Arenas “esta sufriendo una grave crisis” motivada fundamentalmente “por las útimas actuaciones de Rajoy, “quien da un discurso estupendo en relación con la unidad de España pero que luego permite que sean sus organizaciones autonómicas las que decidan qué criterios hay que incluir en los estatutos”. Concretamente se refiere a que “ha habido una gran decepción con Arenas de la realidad nacional cuando hace un año decía que el estatuto de Andalucía no era necesario”.


Nota: obsérvese el titular. Ciudadanos "de Cataluña"...., hablando de Córdoba ¿es un error o una manipulación?...

V.Muñoz. (La calle de Córdoba.com) (26/XI/06)