sábado, 14 de noviembre de 2009

El paro extenderá "la pobreza en España durante los próximos años" PorEuropa Express

BRUSELAS AVISA A SALGADO.
La CE reitera que España será el último país de la eurozona que se recupere de la crisis. Además, avisa de que la pobreza aumentará si no se frena la subida del paro. Considera "dramática" la tasa de paro juvenil, que se sitúa en el 41,7% de la población activa. La zona euro sale de la recesión.


La Comisión Europea (CE) celebró este viernes que los últimos datos de crecimiento confirmen que tanto la UE como la eurozona salieron de la recesión durante el tercer trimestre del año, pero avisó de que el impacto de la crisis económica seguirá durante los próximos meses y se manifestará sobre todo en el aumento del paro. También reiteró que España será el último país de la eurozona que se recupere de la crisis.

La economía de la eurozona registró un crecimiento del Producto Interior Bruto (PIB) del 0,4% en tasa intertrimestral, frente a un descenso del 0,2% registrado en el trimestre anterior, según las cifras preliminares publicadas este viernes por la oficina de estadística comunitaria, Eurostat. En la Europa de los 27, el PIB también salió de terreno negativo y aumentó dos décimas en tasa intertrimestral.

Pese a que tanto la eurozona como la UE salieron de la recesión, España siguió en territorio negativo durante el tercer trimestre del año, con una contracción del 0,3%. Esta cifra es algo mejor que lo que había previsto Bruselas (-0,4%). Para el conjunto del año, la Comisión pronostica que la economía española se contraerá un 3,7% y experimentará una caída adicional del 0,8% en 2010, seguida de una moderada recuperación del 1% en 2011.

De acuerdo con estas previsiones, la economía española saldrá de la recesión en el tercer trimestre de 2010, un año más tarde que la eurozona y la UE. "Se prevé que España sea el último miembro de la eurozona que entre en la recuperación económica", resalta el informe mensual sobre empleo del Ejecutivo comunitario publicado este viernes.

La amenaza social de la pobreza

La CE avisó también al Gobierno español de que la pobreza se extenderá durante los próximos años si no logra frenar la subida del paro, que afecta ya al 19,3% de la población activa, una tasa que duplica la media comunitaria y es la segunda más alta de la UE, sólo superada por Letonia. El Ejecutivo comunitario calificó además de "dramática" la tasa de paro juvenil, que se sitúa ya en el 41,7% de la población activa.

"El desempleo es un impulsor clave de la pobreza en España, por lo que poner freno a la destrucción de más puestos de trabajo será vital para evitar que la pobreza se extienda durante los próximos años", resalta el informe mensual sobre empleo hecho público hoy por la Comisión.

Casi el 50% de los hogares sin empleo en España son relativamente pobres, frente al 37% de media en los países de la OCDE, según los datos de esta organización citados por el Ejecutivo comunitario. Además, el 90% de los españoles tiene dificultades para obtener una hipoteca, y el 78% ve problemas para lograr un crédito, los porcentajes más altos de la UE, según los datos del Eurobarómetro.

Bruselas destaca que, tras impactar inicialmente en el sector de la construcción, la contracción económica "se siente ahora con fuerza en la mayoría de los sectores, especialmente servicios, agricultura, construcción e industria manufacturera". Y avisa que el fuerte aumento tanto del desempleo como del déficit público "puede traducirse en un elevado paro de larga duración y un grave empeoramiento de la sostenibilidad a largo plazo de las finanzas públicas".

Hacia el 20% de paro

El paro seguirá subiendo en España en 2010 (hasta alcanzar el 20% de la población activa) e incluso en 2011 (20,5%), aunque la recuperación ya se haya iniciado, según las previsiones de la Comisión. Además, "se prevé que España sea el último país de la eurozona que entre en la recuperación económica", ya que mientras que los países que comparten la moneda única crecerán un 0,7% en 2010, la economía española se contraerá un 0,8% antes de experimentar en 2011 una moderada recuperación del 1%.

Por lo que se refiere a las medidas adoptadas por el Gobierno para frenar el aumento del paro, especialmente el Fondo de Inversión Local, el informe señala que los aproximadamente 400.000 empleos creados "son temporales y se han utilizado para preservar puestos de trabajo existentes". La dualidad del mercado laboral español se visto acentuada por la recesión. Los empleos temporales representan el 90% de toda la destrucción de puestos de trabajo entre junio de 2008 y junio de 2009, según los datos de la OCDE citados por el informe.

Libertad Digital

Paripé sindical. Por Emilio J. González

La medida alemana es inaplicable a nuestro país, pero es lo que se les ocurre a los sindicatos para evitar tener que hablar de lo que no quieren, esto es, de la reforma laboral que precisa España.

¿Alguien esperaba algo de una nueva ronda del diálogo social? Francamente, yo no. Todo esto no es más que parte del paripé que se han montado el Gobierno y los sindicatos para dar la sensación de que hacen algo para combatir la crisis económica y la destrucción de empleo, cuando la realidad es muy distinta. Y si hoy los sindicatos se tienen que sentar a hablar con las empresas van a tener que empezar a debatir cuestiones que pueden sacarles los colores y prefieren seguir haciendo como hasta ahora: lanzar ideas para que un Corbacho siempre dispuesto a plegarse a sus deseos las recoja y trate de convertirlas en medidas gubernamentales.


El caso más reciente es la propuesta de Comisiones Obreras de que España haga como Alemania, donde los trabajadores han aceptado reducir su jornada laboral para mantener los puestos de trabajo y el Estado les cubre la diferencia entre el sueldo que perciben por menos horas de trabajo y el que obtenían antes de la reducción. Con ello, Alemania por ahora ha evitado que se disparen las cifras del paro, pero la realidad de la economía alemana es muy distinta a la española, donde resulta del todo punto imposible aplicar semejante política. ¿Por qué? En primer lugar, porque España, con un déficit y un endeudamiento públicos galopantes ya no tiene margen presupuestario alguno para hacer nada, después de que el Gobierno haya tirado el dinero como lo viene haciendo desde antes incluso de la crisis. En segundo término, porque Alemania ya empieza a poner rumbo hacia la recuperación económica, con lo que dicha medida tiene un horizonte temporal corto, mientras que en España, en el mejor de los casos, los primeros atisbos de recuperación no se producirán hasta 2012 y, desde luego, no bastarán ni para crear empleo ni, tan siquiera, para poner coto a la sangría del paro. Dos años es mucho tiempo para que el Estado pueda financiar semejante política cuando, además, no tiene un solo euro en sus arcas.

Por último, Alemania es un país de grandes empresas, que tiene capacidad para mantener sus plantillas con menos horas de trabajo y se recuperarán tras la crisis y volverán a ser capaces de mantener altos niveles de empleo, mientras que España es un país de pequeñas y medianas empresas que carecen de la capacidad de conservar el empleo y se ven amenazadas por la posibilidad de quebrar porque carecen de potencia financiera para aguantar el tipo y porque no tienen acceso alguno a una financiación que está devorando el Estado con ansiedad. Así es que la medida es inaplicable a nuestro país, pero es lo que se les ocurre a los sindicatos para evitar tener que hablar de lo que no quieren, esto es, de la reforma laboral que precisa España.

A los sindicatos empieza a preocuparles la situación socioeconómica española, básicamente porque como ya se han destruido todos los empleos temporales, ahora el paro ya está afectando a los trabajadores con contrato fijo que son quienes, en última instancia, los sostienen con sus afiliaciones, escasas y decrecientes, y con su participación en las elecciones a comités de empresa, en las cuales muchos delegados se presentan bajo las siglas de UGT y CCOO sin ser afiliados de las mismas, lo que permite a ambas centrales mantener la ficción de que son representativas. Estos trabajadores con contrato fijo son los que ahora, ante la pasividad de Méndez y Toxo y su connivencia con un Gobierno que no hace más que empeorar la situación económica día a día, pueden volverse contra los sindicatos. De ahí su preocupación por dar la idea de que hacen algo cuando no es así. Por ello hablan de reducción de jornada a la alemana y por ello, también, han dejado que se extienda la idea de que se puede retomar el diálogo social, como si eso fuera a resolver algo.

Por desgracia, y tal y como están las cosas, a estas alturas ya no vale con decir que los sindicatos van a sentarse con la patronal a la mesa de negociaciones y no hacer nada más, porque la sociedad española ya está cansada de palabras huecas, sin contenido, y reclama soluciones. Unas soluciones que los sindicatos se niegan a debatir porque su posición no es pragmática, sino ideológica, y lo que hay que hacer en este país va en contra de las ideas equivocadas que defienden. Por ejemplo, hoy por hoy, con el 47% de los jóvenes en paro, es más necesario que nunca el acabar con el salario mínimo interprofesional para que puedan tener una oportunidad de ingresar en el mercado de trabajo, algo que nuestros sindicatos jamás van a aceptar. De la misma forma, es preciso abaratar el coste del despido en los nuevos contratos, que no en los ya existentes, para facilitar que las empresas puedan incorporar nuevos trabajadores en sus plantillas, a lo cual la respuesta sindical es un "no" más que amenazador. Y eso por no hablar ya, por ejemplo, de todo lo que tiene que ver con la movilidad laboral; ¿cómo se explica que, con los actuales niveles de paro, haya miles de puestos de trabajo sin cubrir en la agricultura?

Todas estas cuestiones, junto con la congelación e, incluso, reducción de los salarios, son las que tienen que tratarse en el diálogo social. Pero diálogo implica disposición a conversar y los sindicatos no la tienen cuando se trata de estas materias. Con lo cual no es de extrañar que Toxo haya enfriado las expectativas en torno al diálogo social. Mientras el Gobierno siga siendo prisionero de su temor a que los sindicatos le convoquen una huelga general y éstos persistan en su actitud de negarse a defender de verdad a los trabajadores y sus derechos, mientras perciben millones y millones de euros del Gobierno para tener la boca callada, aquí jamás podrá haber diálogo social. Y el tiempo de hacer el paripé por parte de las centrales ya ha pasado, porque no se pueden seguir creando falsas expectativas en una sociedad que pide a gritos soluciones contra el paro, porque las cosas pueden estar a punto de volverse contra UGT y CCOO.

Libertad Digital - Opinión

¿Y qué ha sido de nuestras instituciones?. Por Angel Expósito

Asistimos a una patética «desinstitucionalización» en España que parece no tener fin. Podemos poner sobre el tapete varios ejemplos y seguro que olvidamos algunos:

El Tribunal Constitucional ni está ni se le espera, y en la memoria ciudadana permanece como foto fija su presidenta abroncada por Fernández de la Vega; el Estado Mayor de la Defensa es ninguneado por una decisión política en contra de cualquier estrategia militar; la reforma de RTVE se plantea sin que su presidente sepa ni «mu» y la Audiencia Nacional emite un insólito comunicado contra el Gobierno, por no hablar del Consejo de la Energía o del Consejo de las Telecomunicaciones. Y para colmo, en otro plano, Laporta dejará al Barça sin un solo socio fuera de Cataluña; y del Real Madrid, mejor me callo.

Algo está pasando, y muy grave, cuando un Estado hace que sus instituciones pierdan su honor poco a poco. Esta «desinstitucionalización» paulatina resulta peor que su propia desaparición.


ABC - Opinión